La espirometría es una prueba sencilla y no invasiva que mide la cantidad de aire que puedes inhalar y exhalar, así como la velocidad con la que lo haces. Esta prueba es fundamental para evaluar la función pulmonar y diagnosticar enfermedades respiratorias como el asma, EPOC y fibrosis quística.
Diagnóstico temprano: Detecta enfermedades respiratorias en sus etapas iniciales.
Tratamiento personalizado: Permite a los médicos adaptar el tratamiento a las necesidades individuales de cada paciente.
Mejora tu calidad de vida: Ayuda a controlar los síntomas y mejorar la calidad de vida.
Prevención de complicaciones: Permite detectar y tratar a tiempo complicaciones potencialmente graves.